Esta web, cuyo responsable es Bubok Publishing, s.l., utiliza cookies (pequeños archivos de información que se guardan en su navegador), tanto propias como de terceros, para el funcionamiento de la web (necesarias), analíticas (análisis anónimo de su navegación en el sitio web) y de redes sociales (para que pueda interactuar con ellas). Puede consultar nuestra política de cookies. Puede aceptar las cookies, rechazarlas, configurarlas o ver más información pulsando en el botón correspondiente.
AceptarRechazarConfiguración y más información

mupsicomio

Era o es Trobán un lugar detestable para vivir, por Dios que sí pero incluso en las cloacas nacen ratas, y de igual forma en un pueblo miserable y reinado por un grupo de dictadores. Aunque esto no venga en cuenta con nuestra historia, es posible que sólo así entendáis, cómo y en qué condiciones nació Bandeer...

Bandeer, sobre todo, no es el único protagonista del horror que resguarda el Mupsicomio, y este estando en un lugar a pesar de su voluntad (podría decirse que no es así) encuentra un gusto malsano, torcido, y enfermizo en aquel sitio, donde nada es lo que parece.

Con toda franqueza puedo decir que he odiado que en el desarrollo de las historias, por simples o complejas que sean, sin embargo que en ellas se vayan perdiendo personajes y todo este perdido, siempre lleguen en su término a ser finales felices y de completa paz; Absurdo…

 

 

Esto no es una historia para dormir, no es un cuento para leer a tus niños, y no tiene relación con nuestro mundo, sólo existe en la mente del autor... o no.

Esto es el Mupsicomio, y este no es un final feliz... Disfruten; sí disfruten.