Esta web, cuyo responsable es Bubok Publishing, s.l., utiliza cookies (pequeños archivos de información que se guardan en su navegador), tanto propias como de terceros, para el funcionamiento de la web (necesarias), analíticas (análisis anónimo de su navegación en el sitio web) y de redes sociales (para que pueda interactuar con ellas). Puede consultar nuestra política de cookies. Puede aceptar las cookies, rechazarlas, configurarlas o ver más información pulsando en el botón correspondiente.
AceptarRechazarConfiguración y más información

seba2082

La accesibilidad física aplicada al diseño de los ascensores

 

Durante todo proceso de proyecto o re funcionalización de un conjunto viviendas colectivas en altura, edificio de oficinas o simplemente una vivienda unifamiliar una de las preocupaciones del proyectista es la de posibilitar y facilitar el acceso de todos sus rincones a personas con capacidades de movilidad diferente, especialmente para quien deba recurrir para ello al uso de una silla de ruedas.

 

Es, entonces, cuando los arquitectos e ingenieros nos consultan sobre cuáles son las dimensiones mínimas de un elevador que salve las diferentes alturas entre plantas, consultan sobre que otro elemento se encuentra a disposición, etc.

 

Además de dar respuesta a las necesidades futura del tráfico vertical, tema que en este tratado no abordaremos, la preocupación del proyectista de los medios que facilitan la accesibilidad (medios accesibles) es lograr que la persona con movilidad diferente logre su autonomía y que no deba de recurrir al auxilio de otra persona.

 

Conocer las limitaciones de movilidad y la forma en que estas pueden ser atenuadas nos permite pensar y diseñar los elementos que ya no solo llamaremos elevadores o ascensores sino: derribadores de barreras.

A la accesibilidad se la puede definir como el grado en el que todas las personas pueden utilizar un objeto, visitar un lugar o acceder a un servicio, independientemente de sus capacidades técnicas, cognitivas o físicas.

 

Que podamos acceder a los diversos servicios de nuestro entorno es indispensable e imprescindible, pues la vida plena se logra en base a un conjunto de sentimientos de independencia y autonomía del ejercicio de la propia voluntad.  Es en este sentido que el derecho a transitar toma primordial importancia, pues es condición del humano el de movilizarse, experimentar, sentir y disfrutar del entorno y estas condiciones de accesibilidad deben de aplicarse al entorno más cercano de la persona: su hogar, el sitio de trabajo o los centros de servicios.

 

La accesibilidad al entorno como condición de igualdad o la eliminación de las barreras a condición de lograr la satisfacción de las necesidades básicas humanas es tarea de la sociedad en su conjunto.