15 / julio / 2010 
El lanzamiento de Libranda y la aparición de plataformas de contenidos digitales ha puesto aún más de actualidad el debate sobre el futuro “digital” del libro. Autores, editoriales, distribuidores y otros profesionales del sector experimentan sensaciones encontradas, fruto de la oportunidad que supone la aparición de nuevos soportes para fomentar los hábitos de lectura y dinamizar la industria editorial, por un lado, y la desconfianza ante unos cambios que se acercan de forma irremediable, por otro.
Para prever el impacto del libro electrónico en el sector editorial quizá pueda ayudarnos reflexionar sobre cómo cambiará su uso la experiencia de cada uno de nosotros como lectores. Una reflexión que queremos compartir con vosotros: ¿Creéis que realmente se producirá un cambio drástico en nuestros hábitos de lectura? ¿O acaso los lectores más ávidos (sobre todo los amantes de la literatura) seguiremos teniendo un vínculo inquebrantable con el papel?
Lo cierto es que con la popularización de Internet y la proliferación de los contenidos digitales el número de lectores ha aumentado significativamente. No sólo hay más usuarios que leen, sino que los usuarios leen más y leen contenidos más diversos.
Son muchos los amantes de la lectura que se declaran abiertamente amantes del libro como objeto: de su olor, del tacto de sus hojas, de la cubierta o simplemente encuentran un valor añadido en la posibilidad de tenerlo en las manos. ¿A quién no le gusta llenar las estanterías con sus libros favoritos? Sin embargo esta predilección no implica necesariamente un rechazo a las nuevas tecnologías. La mayoría de estos lectores no descarta adentrarse en el mundo del e-book si la lectura es igualmente cómoda. Aunque parezca lo contrario, si comparamos la pantalla de un lector con la hoja de papel veremos que el libro electrónico nos brida diversas ventajas en cuanto a su uso: la opción de aumentar o disminuir la letra para hacer más fácil la lectura, la posibilidad de almacenar una auténtica biblioteca multimedia y llevarla con nosotros a cualquier sitio o la capacidad de actualizar los contenidos rápidamente son algunas de sus ventajas más notables. Si bien los lectores electrónicos aún no han logrado penetrar en el mercado, seguramente las mejoras tecnológicas que los fabricantes seguirán introduciendo en éstos y su previsible bajada de precio ayudará a que acaben adquiriendo la popularidad de otros dispositivos como los teléfonos móviles o los reproductores MP3.
Por último, es importante considerar el hecho de que este nuevo tipo de lectura abre una nueva etapa en la relación con editoriales y autores. El lector actual se documenta, quiere saber más sobre el autor y quiere expresar su punto de vista. Un escritor no se limita a publicar su texto, sino que además dialoga con sus lectores a través de foros, blogs y herramientas sociales. La capacidad de ofrecer servicios que ayuden al lector a mejorar su experiencia digital será otra de las bazas de las editoriales para captar nuevos lectores en este soporte.
Ahora os hacemos esta misma pregunta a vosotros: ¿Cuál es vuestra experiencia como lectores? ¿Pensáis que el libro en soporte digital desplazará al libro en papel, que el e-book será muy minoritario o que ambos formatos convivirán en perfecta armonía?
Comentarios recientes
Hoy es minoritario el ebook, mañana convivirán los dos formatos y a largo plazo (40-50?) se impondrá el digital, quizás ya no lo veamos para entonces.
Saludos.
Ambos van a convivir durante mucho tiempo, aunque visto el precio de los libros en Libranda las ventas de ebooks no van a ser tan altas (las descargas seguro que sí). Al respecto hay un interesante artículo que salió hace poco llamado The Future of Print http://booksquare.com/the-future-of-print/ Cito lo más relevante:
«Print is not dead. It is not even dying, at least not yet. Think of print like an overweight beast, shedding excess weight. The result is a leaner, more defined, more beautiful experience. (…) There’s no telling what book might find a place in a permanent collection, but five seconds in a used bookstore (physical or digital) is enough to prove that much of what is printed isn’t valuable enough to remain a permanent part of most libraries. These are the type of books I believe we’ll see dying in print first. (…) What is important is that these print version be quality — good covers, excellent paper, binding that doesn’t fall apart. Handmade, one-of-a-kind, original, limited edition, personal.»
Gracias por tu reflexión, Jose. En Bubok pensamos que ambos formatos convivirán. Yo personalmente coincido con la opinión de Ángel María de que dependiendo del tipo de lectura y de contenido los usuarios se inclinarán por uno u otro formato. Eso sí, es muy complicado pensar que nos deparará el futuro a muy largo plazo teniendo en cuenta el ritmo al que evolucionan y revolucionan todos los sectores las nuevas tecnologías.
María
Coincido con la cita que compartes, Jose Luis. Interesante artículo. Muchas gracias por compartirlo con nosotros.
María
Llevo tiempo dándole vueltas a la cuestión, y la verdad es que me hace mucha ilusión esta revolución tecnológica para los libros! un mundo para crear de otras formas! Lo de libranda era un paso necesario, a ver el siguiente… Os dejo otro artículo sobre el tema:
http://secanoyregadio.blogspot.com/search/label/Literatura