Por la forma de expresarte diría que estas un poco quemado del tema pero ello no quita que tengas razón y coincida contigo. La crisis es una excusa perfecta para dar excusas (valga la redundancia).
Obviamente hay personas que hoy mismo se lo están pasando muy mal y que de tanto ajustarse el cinturón ya no les queda ni cintura. A ellas no va dirigida mi opinión sino a las que tu aludes sobre que son capaces de gastarse 5 ó 6 euros en un cubata y luego te regatean los precios hasta el punto que si no es gratis parece que se ofenden.
Hace años, cuando Internet ni tan solo se sabía lo que era y lógiamente todavía faltaba tiempo para aparecer Bubok, empecé a hacer mis pinitos en el mundo de los fanzines siendo mi “imprenta” la fotocopiadora de la tienda de la esquina.
El precio de las revistillas que hacia eran casi al precio de coste y las vendía una a una “abordando” a los clientes, muchos de los cuales circulo de amigos y compañeros de trabajo.
En aquella época no había crisis aunque excusas para no comprar sí. Además de la de “voy muy apretado” (cuando yo sabia perfectamente que los fines de semana pillaban una cogorza del 15) me tenia que oír cosas como “No me gustan los cómics” (Bueno, que le vamos a hacer…), “Es que leer me da pereza (Pues lo siento por ti…) o la mejor de todas “Te la compraría aunque no tengo espacio en casa” (!!!!). Aclarar que la revista tenía un tamaño DIN A5 y estaba formada por 24 hojas aunque estos últimos parece que la veían como la Espasa-Calpe en versión extendida y con comentarios del director.
El tema, más que si hay crisis o no, está en enfocar el libro hacia un tipo determinado de personas evitando el lector/a “baratillo” para abordar otro de más interesado por tu trabajo.
Descubre como nacieron estas simpáticas figuras de acción y porque hoy esta línea está considerada como los juguetes por excelencia.
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