El Motivo de la Encarnación en Máximo el Confesor

El tema del motivo, o el sentido, de la encarnación del Hijo de Dios fue planteado por primera vez en forma sistemática en la historia de la teología por San Anselmo de Canterbury en su obra Cur Deus Homo y, desde entonces, no ha dejado de ser objeto de la reflexión creyente en cuanto el misterio de la Encarnación constituye el centro del anuncio revelado y la cuestión anselmiana se transforma en una pregunta medular de toda la teología cristiana.

La cuestión del motivo de la encarnación se puede presentar de dos maneras. Bajo una forma hipotética, se transforma en la pregunta clásica: ¿Se habría encarnado Dios si el hombre no hubiese pecado El inconveniente de esta variante es que, si el hombre no hubiese pecado, habría un orden absolutamente diferente al presente, y sólo Dios sabe como sería ese orden. Nos parece, por esta razón, que lo más apropiado es desarrollar el tema bajo la forma de una proposición positiva y universal: ¿Cuál es el motivo adecuado de la encarnación en el orden presente Así, el presente libro presenta una respuesta a dicha pregunta en la teología de Máximo el Confesor.