Poemas del planeta azul y el cosmos oscuro

          El fascinante big bang, los extraordinarios agujeros negros, el inaudito protón: ¿no es acaso poesía El texto que el lector tiene ante los ojos no es ciencia ni filosofía, pero es en estos territorios entre los que se desplaza el pensamiento asaltando sus fronteras donde desea hallarse y a la vez encontrar la poesía que zarandee al científico y al filósofo: este libro es la poesía de fondo de los últimos descubrimientos y teorías de un cerebro, el que todos nosotros conformamos, que se hallará siempre en deuda con el planeta azul y el cosmos oscuro cuyos misterios ronda desde la noche de los tiempos hasta un presente en el que la materia se revela cada vez más luminosa y más extraña. La forma de conocimiento que quiere ser la poesía no se puede quedar al margen de unos acontecimientos de los que nadie posee la exclusiva: nadie, salvo los que habitan un mundo cuya conciencia es ya la de las estrellas. El poeta intenta abrir ahí una vía de avance sobre las huellas que dejan los científicos y los filósofos y, en definitiva, todos los que a través del pensamiento penetran el secreto del que forman parte y son una pequeña pero imprescindible muestra. Poema es el nombre que se da aquí a la nueva pisada abierta en esta vieja tierra y este antiguo cielo y poesía es el que quizá se pide para lo que no es ciencia ni filosofía pero camina sobre sus pasos sin pretender otra verdad que la de su tentativa en mitad del asombro. Los temas que se tocan no parecen poesía, quizá tampoco la forma en que se desarrollan, y, sin embargo, ¿cómo denominar al enigma La poesía es quizá la única escritura que no se reclama tras otros títulos ni se cobija bajo las grandes ficciones: tal vez ocupa un lugar intermedio entre la verdad y la mentira, la fantasía y la realidad, en este planeta lleno de luz azul de un cosmos que se mantiene perfectamente oscuro.