No sé si quiero saber
cuanto pasa por el mundo.
Saber qué está ocurriendo
con estas gentes,
en esas calles y esas plazas.
Que me cuentes con voz de cada día,
que me enseñes con precisión
de última conquista electrónica,
las caras y los cuerpos
de esos que no saben
“lo mucho que hemos avanzado”.
No sé si quiero
saber que no es posible,
el ruedo de una flor enamorada
del sol y de la lluvia,
que no es posible la bienvenida
de una voz en una lengua
distinta a la del que llega,
ni una mano blanca sosteniendo
el desmayo de una mano negra,
ni un trozo de pan compartido,
ni la dulce sonrisa
de una madre que amamanta
sin miedo a violentos personajes,
ni angustia por dolorosos presagios.
Un rostro de mujer,
son muchos rostros.
Un niño aterrado,
son muchos gritos de niños asustados.
Un hombre con miembros amputados,
son muchos hombres sin mañana.
Porque su miedo es el Miedo,
Porque su hambre es el Hambre,
Porque su muerte es la Muerte.
TEDIO Como un cangrejo ermitaño que al fin encuentra su concha protectora, me acurruco, como un feto, en el cómodo vientre de mi viejo sillón. Y juntos, en silencio, contemplamos inmutables imágenes incesantes que surgen electrónicas en el televisor. M.R. Comas
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OLVIDO Pérdida premeditada. Bálsamo. Negro pozo donde se ocultan: tal vez los peores, tal vez los mejores, momentos del recuerdo. M.R. Comas
TRAYECTORIA Un pájaro en vuelo; detenido, espera un soplo de viento. Se abre una flor. Irrumpe la vida con fuerza: fuego, martillo, hierro. La noche susurra canciones de cuna. Abre el día: sombra y luz. La belleza vela su rostro, aunque flores fueron los jóvenes cuerpos. Se adormece el alma y queda la mente, incansable vigía. M.R. Comas
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SILENCIOS DORMIDOS De la seda de los sueños y del agua de los llantos, la memoria es una cuna; donde duermen los silencios que se envolvieron en hilos de seda y sal. Mejor que duerman; si se despiertan tendrán su metamorfosis; serán palabras que irrumpirán con fuerza, rompiendo los cimientos de todo lo construido. M.R. Comas
HIEDRA Completamente desnuda y adherida a la piedra; estructura enramada; te extiendes dormida en tu otoño. Cada año la primavera te pinta verde; te hace joven; y cubre tus huesos de tiernos brotes. Pero volverán los fríos y los fuertes vientos arrancarán tu ropaje. Péndulo sin reloj ni tiempo futuro que es pasado, presente ignorado, vestida, desnuda, mudando. M.R. Comas
DÍAS MEJORES Noches largas; negros lutos. Barreras construidas con densos fríos. Tristezas masticadas envenenan los cimientos. Empinadas laderas para respirar de piedra.
Volverá un sol vencedor. Yo tendré un mar de estrellas. Las horas serán de luz para apaciguar las fieras. Las murallas serán dunas y los cañones palmeras. Con las alas de la vida llegaré al otro lado de la luna. M.R. Comas
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Mañana salgo para París. Voy a conocer a mi última nieta que nació el día 3 de junio, y es la primara de mi hija menor: Arly. Estaré 15 días con ellos. Os dejo un poema que escribí por encargo de esta hija, que vivía en Holliwood y ya había comenzado su carrera de actriz (Arly Jover: 2º papel femenino en "Blade" y protagonista femenino en "L'empire des loups" - "El imperio de los lobos"- dos películas que se han visto en España. Con su nombre y apellido encontrareís páginas suyas en internet. En aquella ocasión el guionista y director del film, todavía en proyecto, no se sentía capaz de escribirlo, ni sabía cómo encontrar un poema, que expresara el conflicto sentimental de la protagonista (mi hija tenía la oferta para este papel), y ella por tlfno. me lo contó y me pidió mi colaboración. A los 3 ó 4 días le mandé por internet el poema con igual título que la peli. Se lo leyó por teléfono primero en español y después en inglés (ella lo había traducido), y aquel terminó llorando. Lo cuento sin presunción alguna, pero el asunto hasta a mí me sorprende. El argumento es: una española lleva de Espña a USA un poema por el que ella "sabe" que si consigue un gran amor, habrá de pagar por ello con su vida. En USA llaman a las azucenas "lirios del ángel", por la flor que lleva en la mano el arcángel San Gabriel en las representaciones pictóricas de la Anunciación. El poema: EL LIRIO DEL ÁNGEL. De soledades: hielo y escarcha, Sediento y atrapado M.R. Comas |
ACUATICO El sol atraviesa el claro verde, donde tu piel adquiere la suave humedad de lo vivo; formando, oro y luz, una red intangible, que envolviendo tu cuerpo, me invita, traspasando su encierro, a enredarme contigo en ella, como pez dormido, sin tiempo, arrastrados por el dulce ensueño de los dos en el agua. M.R. Comas |
PROFETA Ojos verdes, castaños, azules, negros, grises, cuelgan bajo la noche. Ojos que miran y ojos ciegos, ojos que lloran y ojos que se cierran por no ver lo que imaginan. Un pez se traga las entrañas de algo que flota, y el mar arrastra los últimos vestigios de todos aquellos que pensaron alguna vez. Con los pies clavados en la arena, sin ideas, buscando donde asirse, cree que aún no ha llegado. No ha llegado. Los pies se hunden. Se afianza. Su cabeza (rojo cono truncado), se separa del cuerpo y gira como un derviche, taladrando el espacio se va vaciando de todo lo que le produce nausea. M.R. Comas |
JUEGOS Muy de mañana, El mar borda festones De conchas y caracoles Sobre la arena en la playa. Todas las tarde, El sol pinta un camino Con polvo de oro fino Partiendo el mar en dos partes. Y en la noche, Se asemejan cielo y mar, Y confundida la luna Se prende sobre la espuma Como si fuera un gran broche. M.R. Comas |
A LA ESPERA Acurrucada en el lecho materno, la obscuridad me transmite los latidos de mi corazón. Casi un útero. Todo ha quedado en órden alrededor de la cama. Doblé y guardé la ropa, los zapatos en su sitio, los pendientes duplicados sobre un espejo. Un órden de soledad y presagio que yo busco, sin saber porqué designios. M.R. Comas |
Os vuelvo a dejar, y esta vez con ortografía correcta, el poema de los errores. Duelen los ojos al mirar unos pocos versos tan mal escritos. Muchas gracias por vuestra paciencia. A LA ESPERA Acurrucada en el lecho materno, la obscuridad me transmite los latidos de mi corazón. Casi un útero. Todo ha quedado en orden alrededor de la cama. Doblé y guardé la ropa, los zapatos en su sitio, los pendientes duplicados sobre un espejo... Un orden de soledad y presagio que yo busco, sin saber por qué designios. M.R. Comas |
VARIACIONES SOBRE UNA MAÑANA NUESTRA I Aún la tierra no se abría al calor de la mañana y los pájaros dormían sin sentir la mano blanca de la madrugada fría. Aún la luz no se asomaba tras la negrura del monte, y los odios empapaban con sangre hermana campos y calles, cuando tu mano en mi talle y tu boca recorriendo la tibieza de mi carne, construían fortalezas de seda y nardo, de rosas blancas, para que nada ni nadie estorbara la mañana ni nublara con sus sombras la blancura de mi cama. II La luna se adormecía tras las cortinas del alba. Las olas entrechocaban contra las rocas bravías con sones de cante antiguo. Las palmeras entregaban a los vientos sus melenas de palmas tiernas y verdes, mientras sus frutos caían sobre la tierra de siempre, endulzando los aromas marinos de luz perenne. Todo conjuraba un ritmo perfecto de vida y muerte, cuando tu boca y la mía buscando las embriagueces de los momentos sublimes, se entregaban a los besos y en el mar de las caricias navegaban nuestros cuerpos. III Hirió la aurora a la luna con una espada de plata. La noche se estremecía derrotada por la luz, mientras los vientos peinaban con dedos de madrugada los naranjos florecidos. Una alfombra de rocío engendraba la mañana y tus brazos estrechaban mi cintura temblorosa, tus palabras embriagaban mi conciencia y mis sentidos y envolviendo nuestros cuerpos en el fuego de un volcán, nos lanzaban a universos de primitivas pasiones y en el cosmo se vertían las fuentes de aquel amor. M.R. Comas |
Voy a intentar treraquí los poemas que quedaron sueltos en General.
ENAMORADA
Hoy me desperté |
Otro de la memoria de "General" AUSENCIA |
Otros cinco: EL ALBA Desnuda de sentimiento y gesto. Desvestida de palabra y luz. Desvelando las sombras. Dudando. Dándose. SIN TESTIGOS Sin testigos, de la rosa tomo lo que la rosa ignora. Surge de la sombra una palabra nueva, desconocida, sin huella, única. Y un pájaro venido sobre el viento, de mi mano bebe la palabra recién hallada, empapada de aquel aroma antiguo y sin nombre A LA DERIVA Quiso ser fuente, pero subterránea el agua, cambió su curso. Nada queda de aquellos pasos, el silencio se apoderó pronto de la presencia sonora de quien pudo llenar sus manos con algo más que las espinas de un rosal muerto OCASO Cae la tarde. Un cielo candente Se despiden con gritos las gaviotas y de tu voz sólo queda un murmullo que se aleja y muere. Algún día la tarde, ya sin voz, sin pasos y sin vuelos se detenga para siempre, y agonice blanca y fría. AMAR con las manos extendidas. Mirar una estrella sin perder la extensión del firmamento. Contemplar la propia imagen en la profundidad de otros ojos. Encontrar la luz buscada, en la fusión y amalgama de dos almas. María Rosa Comas (25-04-2008) |
También recojo este soneto:
MUJER Te adorarán adalides, los poetas y cantores, si mantienes encendido fuego de hogar cada día. Y si meces esa cuna, nunca jamás ya vacía, te cubrirán de alhelíes y jazmines con olores. Para que tus sueños sean para los otros primores, te dedicarán mil versos y alguna melodía, exclamarán a tu paso con calor: ¡amada mía!
y te pintarán hermosa con sus mejores colores. Si en tu vida conociste que estremecerse es errar, si dentro de ti existen las dudas y los temores y crees que será posible la aventura de volar. De lágrimas que nacieron con tan amargos sabores, de tantas tardes marchitas hundidas en negro mar, compañera, hoy sabemos que otra cosa son amores. M:R. Comas (1996) Para que tus sueños sean para los otros primores, te dedicarán mil versos y alguna melodía, exclamarán a tu paso con calor: ¡amada mía!
y te pintarán hermosa con sus mejores colores. Si en tu vida conociste que estremecerse es errar, si dentro de ti existen las dudas y los temores y crees que será posible la aventura de volar. De lágrimas que nacieron con tan amargos sabores, de tantas tardes marchitas hundidas en negro mar, compañera, hoy sabemos que otra cosa son amores. M:R. Comas (1996) |
Bueno, la tecnología me sigue conduciendo a su aire: además de dividir en dos el segundo cuarteto, que escribí correctamente construido (ay, ay, ay), se me olvidó borrar la mitad utilizada para copiarlo palabra por palabra. No tendré más remedio que hacer como todo el mundo: pasar a pdf los poemas que más me gusten y editarlos. Buscaré un hijo que tenga tiempo para ayudarme. Lamentablemente he comprobado que lo empezado es una chapuza. Gracias a todos y a todas por vuestro interés. |