ANIVERSARIO _...se ha cumplido, hoy, veintitres de diciembre; varios museos internacionales, entre ellos el Louvre, el Prado y el MOMA, han acordado empezar a exponer hoy varias obras del artista, en reconocimiento póstumo a su trabajo; todas desconocidas hasta la fecha. Las obras estarán a disposición del público hasta el 30 de enero, en que serán retiradas para subasta privada.... |
Dura competencia. Se ha cumplido: mi esfuerzo no resultó baldío… -¡Enhorabuena! El puesto es suyo. Estábamos indecisos entre usted y su compañero, pero García llega tarde y ya sabe cuánto nos disgusta la impuntualidad. -Fea costumbre… No lo volverá a hacer. ¡Seguro! –le respondí estrechando su mano. -¿Qué hará ahora, Gutiérrez? -Me tomaré unas vacaciones. Serán las primeras en quince años. -¡Bien pensado! ¿Dónde irá: playa o montaña? -Montaña, señor. He alquilado una solitaria cabaña encerrada entre pinos al lado de un gran lago. -La tranquilidad es importante para reponer energías -me sonrió. Asentí: «También lo es para deshacerse de un cadáver». |
La guerra es la guerra. -¡Se ha cumplido el plazo! –se oyó desde el otro lado del patio. Era su hermano mayor haciéndose el duro delante de sus amigotes. Había secuestrado a su muñeca preferida y seguramente acabaría destrozándola, como ya había hecho otras veces. -¿Qué has dicho que quieres? –preguntó ella una vez más. -¿Es que estás sorda? –y volvieron a oírse las absurdas condiciones pedidas para la liberación. -Gracias por repetirlo. Creo que esta vez lo he grabado bien –dijo dejando su nuevo móvil a la vista. -Pero... ¿qué haces? -Chantaje, creo que se llama chantaje. |
Se ha cumplido –Se ha cumplido. –¿Qué? –¿Qué de qué? –Tú sabrás. –¿Y por qué tengo que saberlo yo? –Porque lo acabas de decir. –¿Qué acabo de decir? –Que se ha cumplido. –¿Y qué se ha cumplido? –¿Lo ves? –No, si al final seré yo el culpable. –¡Mira, si quieres lo dejamos! –Vale. –Separarnos, quiero decir. –Que vale. –Pero que conste que lo pides tú. –¡No jodas, pero si lo estás pidiendo tú! –Pues entonces no lo dejamos. –Pues no lo dejamos. –Que quede claro que si seguimos juntos es por tu culpa. –¡Se ha cumplido! –¿El qué? –... |
Huitzilihuitl -Se ha cumplido todo tal y como lo ordenasteis. Visitamos las aldeas del valle, aquellas que se rebelaron a vuestra autoridad. Las afiladas dagas de obsidiana de los sacerdotes han hendido el pecho de los muchachos. Su sangre desbordó el Chac Mool, y sus corazones, en número de doce veces doce, arden en la pira frente al templo. -Tezcatlipoca estará satisfecho y nos guiará hacia nuevas victorias. Estoy seguro. ¿Y las doncellas? -Las doncellas, en número de doce veces doce serán conducidas hasta vuestro palacio, gran señor. -Perfecto. Presumo que el dios no será el único en quedar satisfecho... |
El sicario “Se ha cumplido el encargo”, dijo. “¿Terminó todo entonces?”, respondí incrédula. “Rápido, como pidió, casi sin dolor”. Mejor así, pensé, no quiero cargos de conciencia más allá de lo necesario. Recordé su mirada, el cariño que le tuve en otro tiempo. “¿Qué hago con el cuerpo?” insistió, “lo he troceado”. Imaginé la escena y se me revolvió el estómago, la sangre impregnando las manos de aquel hombre. “Yo misma pasaré a recogerlo” contesté. Luego me asaltó la duda: ¿Y si el pavo no les gustaba? ¿No sería mejor haber comprado una buena merluza? |
Luces de vida Se ha cumplido mi sueño, ahora del interior de esta especie de caja brotan sonidos, algo así como si estuviera recibiendo o mandando un fax. Las lucecitas rojas van, una a una, transformándose en verdes y yo las miro hipnotizada. Parece un milagro, me digo, pero solo es tecnología. Para mí un misterio y una suerte: mi corazón y el hospital comunicados por este sencillo artilugio. |
Pide un deseo Se ha cumplido. Por primera vez se ha cumplido el deseo que pidió mientras, tras la insistencia infantiloide de su hermana, leer ilusión en la dulce mirada de su mujer, cerrar los ojos y respirar profundamente, sopló las velas con la mente en blanco. La blancura le hizo sentir el soplo de cristales rotos mientras entreabría los ojos para expirar, desdibujando con sal la mirada de su viuda al tiempo que su hermana repetía, cual niño que se niega a aceptar la verdad sobre los Reyes Magos, que se pondría bien. Se ha cumplido. Nada deseó y la nada obtuvo. [Editado a petición del autor]. |