Esta web, cuyo responsable es Bubok Publishing, s.l., utiliza cookies (pequeños archivos de información que se guardan en su navegador), tanto propias como de terceros, para el funcionamiento de la web (necesarias), analíticas (análisis anónimo de su navegación en el sitio web) y de redes sociales (para que pueda interactuar con ellas). Puede consultar nuestra política de cookies. Puede aceptar las cookies, rechazarlas, configurarlas o ver más información pulsando en el botón correspondiente.
AceptarRechazarConfiguración y más información

Foro para escritores de Bubok

Para participar en los foros de Bubok es imprescindible aceptar y seguir unas normas de conducta básicas. Puedes consultar estas normas aquí
X
itziar16
Mensajes: 44
Fecha de ingreso: 2 de Octubre de 2011

RELATO: ABRAHAM MATEO Y GABRIELA SEPÚLVEDA ¿AMIGOS? PARTE 1/2

2 de Diciembre de 2012 a las 15:19

Los cantantes juveniles Gabriela Sepúlveda y Abraham Mateo de 13 y 14 años son muy amigos desde que Abraham la descubrió por unos vídeos de internet. Y le empezó a dar su apoyo, por eso Gaby descubrió a Abraham Mateo y a su hermano Tony Mateo y también les dio su apoyo. Desde entonces empezaron Gabriela empezó a hablar con Tony y con Abraham por YouTube, se hicieron tan amigos que de vez en cuando habla con Abraham o Tony o con los dos por Skype y se llamaban por teléfono. Gaby decía que los dos eran como hermanos para ella. Tony también la veía como una hermana. Un día Gaby y Abraham estaban hablando por una vídeo llamada por Skype y los dos se mintieron sin mala intención el uno al otro.

-¡Hola Gaby!

-¡Hola Abraham!

-¿Qué tal estas?

-Yo muy feliz. ¿Sabes  voy a estar en ``Halloween Fest ´´ el 21 de este mes y es como un concierto benéfico para becas de estudiantes hispanos.

-Me alegro mucho por ti Gaby, ya sabes que aparte de admirarte como lo que eres: una gran artista, te quiero como a una gran amiga. –Abraham mintió en lo último.

-Gracias Abraham, me encanta tu acento andaluz, es hermoso y yo te quiero como a un hermanito. –Gaby también mintió en esto último, lo que pasaba era que se gustaban, ni Abraham quería a Gaby como una gran amiga solo ni ella lo quería como a un hermano, se querían como novios, pero ninguno de los dos se atrevía a decírselo al otro.

- A mí sí que me encanta tu acento estadounidense-mexicano-chileno mezclado, ese sí que es precioso. ¿Te gustas de alguien Gaby? -``Ojala no te gustes de nadie, ojala te gustases de mí ´´ pensó Abraham.

-Nadie. –Dijo enrojecida.

-Venga a mi me lo puedes contar que no se lo voy a contar a nadie. Ni a mi hermano Tony, te lo prometo.

-Em bueno, sí, un chico de mi clase de drama con abuelos italianos se llama Donatello. Es un chico muy simpático, bueno y muy lindo se nota que tiene sangre italiana. -``Ojala yo te gustase a ti y te esté dando celos con esta mentira sin mala intención ´´ pensó Gaby en inglés.

-¿Y no puedes estar con él?

-Pues no sé, no sé si él también siente lo mismo y no me atrevo a decírselo. Pero de todas formas creo que tiene novia, así que no sentirá eso por mí. -``¡Bien! ´´ Pensó Abraham. –¿Y a ti te gusta alguien hermanito?

-Bueno, una chica de mi clase, se llama Alba, pero vamos que tiene novio. -``¡Que padre! 1´´ pensó Gaby.

-Ah,  pues los dos andamos mal en estos temas. Pero aparte tú eres muy lindo y pareces un modelo.

-Tú sí que eres guapísima y pareces una modelo. –De repente Abraham le empezó a mirar fijamente con cara de enamorado.

-¿Por qué me miras así Abraham? –Preguntó Gaby que se estaba empezando a poner nerviosa, más de lo que estaba antes, a pesar de disimularlo genial. –Abraham ni se inmutó de la pregunta, cuando de repente entró su hermano mayor Tony.

-¿Qué haces mirando a la pantalla del ordenador tan concentrado hermanito? –Abraham se asustó y se enrojeció:

-¡¿Qué?! Yo, nada. Solo estoy hablando con Gaby por Skype.

-Ah, bueno que tenemos que ir a cenar quillo. –Dijo Tony aún sorprendido –Hola hermanita, lo siento tengo que ir a cenar, me alegro de verte. Ya hablaremos.

-Yo también me alegro de verte hermanito Tony. –Respondió Gaby, que a este lo quería como a un hermano realmente.

-Vale, me despido de Gaby  me voy. –Dijo Abraham. –Bueno, Gaby lo siento me tengo que ir a cenar que aquí ya es la hora de cenar. Te quiero mucho. -``Y no como a una amiga ´´ pensó.

-Yo también. -``Y no como a un hermano ´´.  –Abraham apagó el ordenador y se fue a cenar. Durante la cena, Tony no paraba de mirarlo con unas miradas extrañas. Abraham se dio cuenta y pensó ``¿Qué pensará mi hermano de cómo me ha visto mirando a Gaby? Espero que no se haya dado cuenta, aunque él me conoce muy bien, ya que estamos muy unidos, así que supongo que se habrá dado cuenta´´. Cuando acabaron de cenar, Abraham se fue a dormir, ya que estaba muy cansado y Tony fue a su habitación:

-Abraham ¿Te puedo hacer una pregunta?

-Sí, claro.

-Voy a ser directo ¿Te gusta Gaby?

-¿Pero qué dices tío si solo la conozco por internet?

-¿Y qué? Hay mucha gente que se está haciendo pareja ahora por internet.

-Sí, pero yo no soy de esos.

-Hermanito no me engañes, que te conozco desde que naciste y además que te he visto la mirada que tenías en el ordenador.

-Vale, sí, me gusta. ¿Pasa algo?

-No, solo quería saberlo tío. Por cierto, pues para mí que ella también se gusta de ti eh.

 

-¿Pero qué dices si siempre dice que me quiere como a un hermano? Y si me quiere como a un hermano no se puede gustar de mí. A mí no me gustan las chicas a las que quiero como a hermanas. Además, me ha dicho que le gusta uno de su clase.

-Yo creo que te miente y no te quiere como a un hermano.

-Entonces a ti también te puede mentir cuando te dice que te quiere como a un hermano.

-No, pero  a mí no me miente en eso, créeme que suelo tener intuición para esto ¿No te acuerdas de lo de Andrés y Carla?

-Sí ¿Y qué hago?

-Dile que te gusta. Yo pensaba que Carolina nunca saldría conmigo, pero no sé como un día me atreví a decírselo y me dijo que sí. Y ahora llevamos más de 2 años y medio juntos. Pero claro sería mejor en persona y eso en vuestro caso es imposible.

-Gracias por tus consejos hermanito, eres el mejor. Te quiero. –Dijo Abraham y se dieron un abrazo.

San José, California, Estados Unidos

Diana, la madre de Gaby le preguntó a ver si le gustaba alguien.

-No tengo tiempo para pensar en esas cosas, además todavía soy muy joven. –Mintió, ya que no se atrevía a decirle a su madre que estaba enamorada de Abraham, al que solo conocía por internet y temía que su madre no le entendiera. Cuando su hermano Daniel volvió a casa, se lo conto, puesto que llevaba mucho tiempo callándoselo.

-Hola Dani, ven un momento a mi cuarto por fa. –Se fueron juntos al cuarto de Gabriela y cerraron la puerta. –Te tengo que contar una cosa, pero no se l cuentes a los papas por fa.

-Vale, venga hermanita suéltalo.

-Pues me gusta Abraham.

-Vaya nueva. Y a mí.

-No a ver, no de la forma de cantante. Quiero decir que me gustó de él. Yo le digo que es como un hermano, para disimular si me enfado mucho cuando le chinchan o algo, pero ¿Qué hago?

-Hermanita, sinceramente yo creo que él también se gusta de ti. Ustedes tienen muy buena química, se les nota cuando les veo hablar juntos. Si todo va bien dentro de un año se verán en Puerto Rico. Y allí le podrás decir lo que sientes por él. Y no me creo a Abraham cuando te dice que te quiere como a una amiga y punto. Y como te conozco, no te preocupes por lo que pensarán las princesas traviesas (las fans enamoradas de Abraham Mateo), si son sus fans de verdad ni te criticaran ni nada.

-Gracias por tus consejos hermanito. Te quiero – Se abrazaron. Pasó el año y Gaby y Abraham se juntaron en San Juan, la capital de Puerto Rico, donde actuaban los dos por separado, ya que era un concierto al que asistían muchos artistas. Cuando se terminó el concierto y se conocieron por fin, se dieron un abrazo.

-Gracias por todo el apoyo que me das y por tu amistad. Que mi cantante favorito me trate así, no tiene precio. –Dijo Gaby.

-Gracias a ti por el apoyo que me das tú a mí.  Y por lo bien que nos tratas a mí y a mi familia, eso sí que no tiene precio. Ah y tú eres una de mis cantantes favoritas.

-Te tengo que decir una cosa. –Dijeron los dos a la vez.

-No, no dila tú. –Dijo Abraham.

-Bueno, igual te suena un poco raro, pero ¿Sabes que muchas veces te dije que eres como un hermano? Pues era mentira, yo no te quiero como un hermano. –Lo dijo despacio y nerviosa.

-¿Ah, no? –Respondió perplejo.

-No, estoy enamorada de ti. Ya sé que es raro, al que nos acabemos de conocer hoy personalmente y eso, pero no sé me pasó eso hace un año y medio. –Abraham sacó una gran sonrisa de felicidad:

-¿Cómo? No me lo puedo creer, a mí me pasó lo mismo. Y yo tampoco te quiero como a una amiga, sino que estoy enamorado de ti. Entonces empezamos a salir ¿no?

-Sí, claro. –Se besaron y se fueron a dar una vuelta muy felices. Alguien les habría visto ya que al siguiente día el titular en la mayoría de la prensa amarilla de América y Europa era ``El español Abraham Mateo y la estadounidense Gabriela Sepúlveda salen juntos ´´ o cosas así.

-¿Has visto Abraham? Ya se ha enterado todo el mundo o, al menos toda América y toda Europa, he visto prensa por internet de casi todo el mundo.

-¿Y qué  hacemos lo negamos o lo confirmamos? Es que por una parte están las princesas traviesas y los príncipes azules (los fans del sexo masculino que están enamorados de Gaby) que si lo confirmamos, se van a poner… pero si lo niego me siento mal por ti y tú eres lo que más quiero. Te amo.

-Que hermoso lo que me dices. Yo también te amo. –Se iban a besar, pero Jacobo Calderón, el productor de Abraham le llamó.

Continuará…