Me gusta el tema que has elegido para la próxima edición, Rosa. Entiendo que invita a un relato narrado en primera persona por un personaje real o ficticio. Por ejemplo, aquel relato de Incongruente sobre el hijo de Filipo de Macedonia podría encajar en el tema actual. Espero que se anime esta vez con algo de similar índole para mayor gloria del certamen. |
La suma de los días ... Con la nariz en su cuello, agradecí la suerte de haber tropezado de casualidad con el amor y que tantos años más tarde preservara intacto su brillo. Abrazados, livianos en el agua caliente, bañados por la luz color ámbar de las velas, sentí que me fundía en ese hombre con quien había andado un camino largo y abrupto, tropezando, cayendo, volviendo a levantarnos, entre peleas y reconciliaciones, pero sin traicionarnos jamás. La suma de los días, penas y alegrías compartidas, ya eran nuestro destino. Isabel Allende (Autobiografía) Ya tenemos un relato ¿La últtima oportunidad? Gracias al madrugador-a por la rapidez. Espero el segundo que seguro que llegará pronto. |
Hola Karensia, si te gusta escribir a lo mejor te apetecería participar en el concurso. Ya sabes que no nos jugamos nada más que la satisfacción de que nos lean y luego comenten nuestro trabajo. He visto tu ficha, si nos contaraas algo de tí cumplirías con alguno de los requisitos, otro ya lo cumples, el de tener un libro publicado, también podrías hacer comentarios por los hilos, eso aumentaría tu cuota. No hay problema. Si quieres lee las normas, están aquí en el foro de relatos. También te vendría bien leer los dos relatos que hay ya publicados. Más que nada para que te hagas una idea del estilo y el nivel de los participantes. Parece complicado, a lo mejor, pero te aseguro que es sencillo cuando se comprende. Bienvenida pues, espero que te animes. Tienes bastante tiempo aún. |
Autobiografía Nací hacia finales de la Edad Moderna, poco antes del incipiente retorno del Medioevo, bajo el signo de Sagitario y amablemente influido por Júpiter. Mi nacimiento se produjo a primera hora de la tarde un cálido día de julio y la temperatura de aquella hora es la que, inconcientemente, he amado y buscado durante toda mi vida y la he añorado dolorosamente cuando me faltó. Nunca pude vivir en países fríos y todos los viajes voluntarios de mi vida se dirigieron al Sur. Hermann Hesse |
Con esa reverencia y credulidad ciega que me son tan características, cuando del prestigio y de la tradición de mis mayores se trata, me he tragado - sin rechistar y casi supersticiosamente - un cuento que no me fue posible comprobar, a tiempo, a la luz de la experiencia del juicio propio. Me hallo, por tanto, firmemente convencido de que nací el 29 de mayo de 1874, en Campden Hull (Kensignton) y fui bautizado con arreglo al ritual de la iglesia Anglicana, en el pequeño templo de San Jorge, frente por frente a la gran torre de los Waterworks, que dominaba esa altura. No pretendo aducir significado alguno a la relación que pueda haber entre ambas edificaciones; y es más : niego, con arrebatada indignación, que el dicho templo fue elegido porque necesitase toda la fuerza motriz del West-London para poder hacer de mí un cristiano. Gilbert K. Chesterton
|
Gracias Josep, estoy segura de que tú y los demás, entre sorbito y sorbito al mojito helado, estáis preparando una autobiografía de las que levantan el sombrero. Y yo espero impaciente verlas aquí para ir leyendolas poco a poco. Os traigo hoy algunas palabras de la autobiografía de una mujer valiente para su época: "Un día, ya entrada en años, en el vestíbulo de un edificio público, un hombre se me acercó y me dijo: «La conozco desde siempre. Todo el mundo dice que de joven era urted hermosa, me he acercado para decirle que en mi opinión la considero más hermosa ahora que en su juventud, su rostro de muchacha me gustaba mucho menos que el de ahora, devastado» Marquerite Duras "El amante" Seguro que hay una historia escondida en el baul de vuestros recuerdos de la que puede brotar un estupendo relato autobiográfico. Vamos, no tengáis vergüenza. |
Segura estoy de que no os habéis olvidado de nuestro concurso de relatos, ni del tema que es: Autobiografía. Tenéis mucho tiempo aún para ir escribiendo la historia de esos recuerdos que no podéis olvidar, aventuras que vivistéis hace tiempo, cosas inventadas de otras vidas contadas como vuestras. El final será el día 5 de setiembre, así que no lo dejéis hasta ese día, dadnos el gusto de leeros poco a poco. La Higuera En un rincón de la huerta, en la que hacía esquina, bien pegada al muro de piedras porosas y añejas, estaba la higuera. El olor era delicioso, se expandía por el entorno anunciando la cosecha de higos maduros y jugosos. Era principios de setiembre y el verano tocaba a su fin. Yo no relacionaba bien lo de las fechas, aún, pero sí sabía que si la higuera daba higos pronto tendría que volver a la ciudad. Marta era mi hermana mayor y Felipe mi primo. Estaba sentada en una de las ramas del árbol cogiendo de aquí y de allá los higos más maduros. Luego me dolería la barriga, pero estaban templados por el sol y las gotas melosas asomaban por su borde. Marta se paró junto a la higuera, justo bajo mis piernas que colgaban blandas. Luego llegó Felipe. Miraba de un lado a otro como si buscara a alguien. Cuando vio a Marta se acercó a ella y la empujó contra el tronco del árbol y empezó a besarle en la boca. Estuve a punto de gritar, pero algo me dijo que aquello era raro y digno de verse. Ellos siguieron besándose en los labios, parecía que iban a comerse el uno al otro. Se olvidaron de donde estaban. Felipe levantó la falda de mi hermana y metió su mano, ella dio un gritito y se arrimó a él mucho. Aquello creó en mí una extraña sensación, me pareció que era un secreto que yo no debiera estar viendo, así que tosí hasta que ellos levantaron la cabeza y me vieron allí sentada y con cara de susto. Durante mucho tiempo conseguí de mi hermana y mi primo cualquier cosa que pudiera desear, era un pequeño chantaje, pero que queréis, yo entonces no lo sabía. RZ |
Las encontrarás aqui si tienes alguna duda, pregunta y te responderemos. Animo y participa, estaremos encantados. Saludos y bienvenida. No te preocupes si alguna de las normas te parecen demasiado dificiles de cumplir. Bastará con que dejes una pequeña presentación tuya en tu ficha, que nos enseñes tu cara poniendo una imagen tuya y que hagas unos cuantos comentarios por los foros. Ya sabes si dudas, pregunta. Ya sabes que los relatos se publican de manera anónima, con el avatar concursoderelatos, si te fijas en los ya publicados lo podrás ver. Cuando vayas a publicar me mandas un privado para avisarme, si lo prefieres puedes mandarme el relato por ahí y yo te lo publicaré, o puedes hacerlo tu misma, yo te daré la contraseña para que entres en ese avatar. Parece un poco de lío, pero pronto verás que no lo es. |
Por fin se ha nublado. Demasiado sol y calor no es bueno para las almas norteñas. Así que, entre la vida y Aste Nagusia que la pone un poco patas arriba, os recuerdo que hay un concurso de relatos, que se acerca el fin de mes y vais a cobrar el sueldo, o el subsidio y que hay que escribir un relato autobioráfico. Yo soy el Diego "Empiezo este libro en La Habana. Por fin me decidí a contar todo. No sé, pero siempre me parece que quedan cosas por decir. ¡Qué raro! Con todo lo que ya dije, no estoy seguro de haber contado lo importante, lo más importante". Nadie me hará creer nunca que mis errores con la droga cambiaron mis sentimientos. Nada, soy el mismo de siempre. Soy Maradona. Yo soy el Diego". "Dicen que yo me peleé con el Papa y tienen razón"; "Esto de estar vivo se lo tengo que agradecer al Barba (por Dios) y....al Barba (por Fidel Castro)"; "Es demasiado grande el negocio de la droga como para que yo lo detenga". |
Se cierra la edición el 5 de setiembre a las 22'00 Autobiografía Es la historia de una vida que, al exteriorizar hechos de conciencia, proyecta toda una serie de recuerdos desde la intimidad del propio ser. Todo hombre capaz de centrar su pasado en los hechos de su historia vivida está hacienda su propia autobiografía. Como todo género literario, con sus linderos fijos, se mueve en torno a dos planos cuya existencia es necesaria; a uno de ellos lo llamaremos subjetivo y su exigencia es tal que todo, absolutamente todo, gira en torno suyo. El autor siente la necesidad de explicar su propia actuación con los problemas que ello implica y lo hace desde su intimidad, porque en ella tiene la vida una auténtica realidad. El propio yo predomina en toda autobiografía. Todo yo histórico se desarrolla en el tiempo y en el espacio; una objetividad se impone, porque la propia vida es la resultante de una serie de factores ajenos al yo. No importa que en la autobiografía destaque el yo sobre todo lo demás. Jamás, y esto es fundamental, lo subjetivo y lo objetivo marchan por distintos caminos; lo objetivo está siempre relacionado y se relata en función de lo subjetivo ante la necesidad de explicar el mundo que nos rodea centrado en la manifestación de la propia personalidad. |
¿Se puede considerar autobiografía a un curriculum vitae? Hoy es martes día 3 de setiembre. Muchos andan cariacontecidos porque han terminado las vacaciones y vuelven a la vida laboral y quizá a preocupaciones que habían aparcado por un tiempo. Día cuatro... y día cinco. Y se acaba esto y cerraré el periodo de recepción para pasar al de reflexión, votación y resultados. Tenemos tres relatos, espero algunos más, porque sería una pena que no los hubiera, ya que los relatos publicados hasta ahora son de calidad. Así que, si alguien me está leyendo, os animo a que participéis. No lo dejéis más y ánimo. |
Doy por finalizado el tiempo de publicar y ahora abro el de votar. Se han presentado cinco relatos así que, si no me equivoco se vota 3-2-1. Estos son los títulos: ¿Su última oportunidad? El Nicas Mejor que limpiar zapatos Las veces que lloré El cazador de osos Espero vuestros votos, animo a nuestros amigos que no han participado a que voten, para darle un poco de vidilla a esto. |
Van llegando votos, cuando haya suficientes publicaré el primer recuento. Mientras, quería comentaros una cosa. Sé que parecerá que mareamos la perdiz, pero me parece que un mes para pasar de una edición a la otra es demasiado. Tengo esa impresión. ¿No os parece que acaba uno olvidándose un poco de que hay que escribir un relato? Volver a la quincena a lo mejor no es lo más acertado. ¿Podríamos tener un concurso de relatos tri-semanal? No sé si se dice así pero ya me habréis entendido. Cada tres semanas procurando siempre que no coincida con el recuento de los microrrelatos. Es solo una idea, si no estáis de acuerdo pues no he dicho nada. Sigamos con las votaciones. |