Esta web, cuyo responsable es Bubok Publishing, s.l., utiliza cookies (pequeños archivos de información que se guardan en su navegador), tanto propias como de terceros, para el funcionamiento de la web (necesarias), analíticas (análisis anónimo de su navegación en el sitio web) y de redes sociales (para que pueda interactuar con ellas). Puede consultar nuestra política de cookies. Puede aceptar las cookies, rechazarlas, configurarlas o ver más información pulsando en el botón correspondiente.
AceptarRechazarConfiguración y más información
Inocencia Martìnez Monroy
Inocencia Martìnez Monroy
14 de Febrero de 2019, 5:48

UN 14 DE FEBRERO

En ocasiones el flujo de palabras dichas por personas inconscientes, orillan a otras a realizar actos que no desean o que aún no están preparados para ellos, el día los 14 de febrero son sin duda un esplendor en la vida de niños, jóvenes y adultos, nunca falta en el salón de clases los compañeritos que llevan las clásicas paletas, chocolates o dulces de corazón que reparten a todos inclusos a sus enemigos, crecen y lo hacen en las oficinas, también en sus lugares de trabajo, pero como bomba los enamorados esperan ansiosos el regalo sorpresa de su pareja llenos de fulgor emotivo derraman miel…
Yo en general no he recibido nada los 14 de febrero, pero no me es de gran importancia ya que el amor florece sin recibir ni dar nada a cambio.
Tuve una experiencia cuando era adolescente, todos a mí alrededor disfrutaban un día antes del glorioso y magnífico 14 de febrero, mis mejores amigas me decían
– ¿qué le regalaras a tu novio?
Llenas de felicidad me mostraban sus proyectos para el día siguiente, observándose tan felices; sentí que algo me faltaba, algo llamado novio, soy tan introvertida lo cual causa que la gente se aleje, la soledad es un sueño de muchos pero nunca la comprenden por tal motivo salen huyendo de sí mismos, porque la soledad es estar con uno mismo.
Pero en esta ocasión ese piquetito en mi sentido límbico causo un desfalco emocional en mi persona y además en mis bolsillos.
Exacto solo para estar en línea con ellas y a pesar de no tener novio, comente – el me prometió un libro y yo le regalare unos chocolates mañana.
Ellas gritaron – !fantástico¡ te acompañamos en saliendo por los chocolates, tienes muy mal gusto además no queremos que pierdas a ese pollito, eres tan agresiva con ellos.
Sentí que el suelo se hundía mi sueldo era tan bajo que no podía solventar semejante gasto, sin embargo el que miente una vez miente otra vez.
– de hecho ya los compre no hace falta.
La clásica amiga metiche, la que queda bien con todos.
– ¡no! Mejor los compras porque conociéndote son unas lenguas de gato.
Si más por hacer solo decir la verdad, fuimos a comprar los famosos chocolates y al día siguiente como loca busqué el libro por toda la ciudad y lo compre a crédito, ¡ellas querían verlo! no podía permitir que supieran la verdad. ser aceptada era esencial, es por ese motivo que en ocasiones hacemos cosas que no queremos...incluso tuve que describirlo físicamente incluso espiritualmente, la única verdad fue que tuve un mes pésimo, estirando el sueldo y comiendo chocolates, incluso leí el libro.