Un mes al revés

Bucear en las aguas transparentes de la Gran Barrera de Coral, es una experiencia que nadie debería perderse. Miles de peces de colores moviéndose en grupos alrededor de corales, también multicolores. Un Pez Napoleón nadando a nuestro lado, también una tortuga con sus lentos movimientos nos acompañó durante nuestro paseo por el silencioso fondo del océano..

Esquiar en los Alpes Neozelandeses, Las Montañas Nubladas, los grandes picachos de La Tierra Media imaginada por Tolkien..

Lagos, fiordos, La Isla Magnética, tener un koala en tus brazos, ver casuarios, kiwis, ibis..

A menudo solemos imaginar todo más difícil de lo que es, incluso pensamos que nuestras ideas o proyectos son inalcanzables y sin siquiera intentar desarrollarlos, los abandonamos por creerlos imposibles. Así habíamos creído siempre que sería viajar a Australia y a Nueva Zelanda, ¡inalcanzable!

Hay personas que pueden pasar seis meses viajando. Otros con más suerte pueden disfrutar de un año sabático para recorrer este apasionante continente, pero lo habitual, lo de todo el mundo, es disponer solo de un mes de vacaciones.

Este libro y sus setenta y ocho fotos, son fruto de un viaje inolvidable realizado por un grupo de amigos, durante un mes de vacaciones. Desde los primeros días, varios de nosostros hicimos un diario y aunque todos vivimos las mismas experiencias, curiosamente cada uno reflejó aspectos y percepciones diferentes, que enriquecieron este relato.