Batalla de Valdejunquera o de Muez

En el siglo X (920), los valles de Guesalaz y Yerri, pertenecientes a la Merindad de Tierra Estella, fueron escenario último de la primera gran batalla de la Reconquista, que enfrentó a los tres personajes más poderosos de aquel tiempo: el Emir de Al-Ándalus, Abderramán III, y los reyes de León, Ordoño II, y de Pamplona, Sancho Garcés I, fundador del reino, derrotados ambos estrepitosamente.

Nunca jamás volvieron a verse juntos. Los cronistas árabes la denominaron batalla de Muez por ignorar otros topónimos anteriores como Deio, y los cronistas cristianos la identificaron por batalla de Juncaria, o de Valdejunquera según el jesuita del siglo XVII José de Moret, al suponer que en un paraje con ese nombre acaeció lo más recio del combate, y aunque el topónimo desapareció de los valles, debió de existir entre los concejos de Muez, Irujo y Arguiñano.