Los exergames como entrenamiento del equilibrio y prevención de caídas en los ancianos: Una revision sistematica

Introducción: Aunque haya habido en la última década un aumento de interés en la utilización de los “exergames” o videojuegos de deporte en los ancianos, la evidencia denota escasa calidad metodológica y tamaño de muestras pequeño en los estudios. Se necesita más investigación para comprobar su utilización de forma segura en los ancianos, ya que están dirigidos normalmente a población joven.

Objetivos: Analizar y sistematizar la evidencia clínica existente acerca de la viabilidad de utilizar los “exergames” de forma segura en los ancianos, y si estos pueden mejorar el equilibrio y la función física para prevenir el riesgo de caídas. También se analizan las circunstancias y la población más adecuada para utilizar estos videojuegos y cuáles serían los parámetros físicos y/o fisiológicos que mejoran. Por último, el grado de adherencia y motivación mostrada.

Metodología: Revisión sistemática de la literatura. Se hizo una búsqueda general y otra focalizada de cinco ensayos clínicos publicados en: tres bases de datos (Lilacs, Pubmed, IBECS), periódicos internacionales (Oxford University Press), revistas online científicas (como Journal of Gerontology, etc…). Se analizó la calidad metodológica de los artículos mediante el cuestionario CASPe.

Resultados: Los “exergames” comerciales, como Nintendo Wii, han demostrado mejorar parámetros físicos y fisiológicos relacionados con el equilibrio como la velocidad de la marcha o fuerza muscular de las extremidades, por tanto, pueden ayudar a disminuir el riesgo de caídas en los ancianos. Además, resultan ser entretenidos y podrían ser utilizados especialmente por ancianos funcionales bajo supervisión.

Discusión: Aunque en ninguno de los estudios de esta revisión haya habido efectos adversos, esto puede deberse a que en casi todos hubo vigilancia durante la intervención y además, la muestra era población activa funcional. Se sugiere que los “exergames” deben estar supervisados, sobre todo en aquellos ancianos con más problemas de movilidad y/o sensoriales.

Conclusiones: Casi toda la evidencia disponible utilizaba videojuegos comerciales como entrenamiento físico y del equilibrio en ancianos funcionales. Se debería investigar más en el uso de otro tipo de “exergames”, programas de intervención más largos y menos supervisados, en población anciana más limitada física y/o cognitivamente, con el objetivo de comprobar sus efectos.