Mi nombre es Angélica Mijares, tengo 16 años, espero poder volver algún día a Alicante, he vivido en España casi dos años, en la ciudad de Alicante, y después me mudé a los Estados Unidos de Ámerica. Espero poder ganar una Beca para poder hacer mi bachillerato allá, en el Instituto Ocho De Marzo, donde la educación a la literatura se aprecia bastante.
Yo sonrío con la lluvia y aspiro fuerte el olor a humedad. Me gusta ver amaneceres desde el autobús, pasar frío cada mañana, saludar con sonrisas tímidas y apuntar frases de amor en el cuaderno.
Yo como muchos dulces y poca comida sana, mi fortaleza me la da el amor en el corazón.
Cuando estoy sola canto melodías de madrugada. Ya sabes, para ahuyentar los fantasmas que me persiguen.
Me gusta recordar sin llegar a herirme, soñar sin hacerme ilusiones. Tengo una sonrisa las 24 horas del día, pero ¿cuántas son de verdad
Soy feliz en un 110%, pero entre tú y yo, a veces dejo microsegundos estancados en el tiempo para cuando me entran ganas de llorar.
Mírame, estoy llena de defectos, de escalones torcidos en la interminable carrera a mi ser. Nunca llegaré a encontrarme del todo, pero me gusta saber que el futuro es un misterio, que el mañana una aventura nueva por vivir.
Veo películas hasta en la sopa de letras, si no encuentro papel me escribo por los brazos y no hay mejor cámara fotográfica que los propios ojos.
Adoro el blues de los 70 y es prácticamente la única música que escucho sin que me duela la cabeza.
La vida se vive una vez, ¡y yo aprovecho cada segundo!
Y adoro escaparme un día porque sí, ver conciertos y sentir que el mundo explotará junto a los amplificadores, vagar por calles que desconozco, despertar en mitad de la calle y volver a casa.
Esta soy yo, son las once realidades que componen mi estructura. Soy multiplataforma y aviso que no hay ascensor.
Y tú, ¿quién eres