Los futuros madre e hijo y la importancia de la salud bucodental.

El estado de gravidez es un momento especial en la vida de la mujer. Desde la antigüedad se ha creído que el embarazo provoca la pérdida de un diente, pero esta afirmación no posee base científica. El conjunto de los cambios intrínsecos y extrínsecos que se relacionan entre sí, hace que la gestante sea susceptible de padecer alteraciones gingivales y periodontales, ya que como todo proceso salud-enfermedad, lo biológico no puede aislarse de lo social. Los cambios hormonales, inmunológicos, de la saliva y microbiológicos que se desarrollan durante el embarazo constituyen factores que elevan el riesgo de padecer periodontopatías como la gingivitis, la caries dental, el granuloma del embarazo y la periodontitis. A estos factores de riesgo debemos sumarle aspectos personales, socioculturales, políticos y económicos que también determinan la salud bucodental de la mujer. Las patologías orales de las mujeres en la etapa de gestación son frecuentes y tienen potenciales implicaciones sobre las condiciones de salud del binomio madre-hijo. En la actualidad, existe evidencia científica que alude a la presencia de la enfermedad periodontal como un factor de riesgo más para los partos prematuros y los bebés de bajo peso al nacer. En cuanto al cuidado bucal, existe evidencia científica sobre el beneficio del tratamiento de las patologías periodontales durante el embarazo por ser seguras para el binomio madre-hijo. Los conocimientos, conductas y el estado de salud bucal de la gestante se transfieren al futuro bebé. Informar a las futuras madres sobre los cambios de la cavidad oral que pueden sufrir durante el embarazo y como prevenirlos es una importante labor de los profesionales sanitarios.