La obra Juana Martín Cabezas y el hijo del Marqués, narra la historia de Elia, que abandona su pueblo con muy pocos años, para ir a la ciudad a servir, en una época de preguerra civil, en la que no había muchas opciones profesionales para las mujeres, salvo el trabajo de criadas en una casa adinerada, o casarse.
En la ciudad, conoce al matrimonio de los marqueses, en cuya casa vivirá hasta quedar embarazada. Elia da a luz a un hijo, del que también se cuenta la historia en la novela en la segunda parte.
La historia se desarrolla en España, en los años de antes de la guerra, durante la guerra, y en la posguerra, en el marco de la ciudad de Alicante y en un pueblo de Andalucía, en el que aparecen nuevos personajes que darán un cambio de rumbo a la historia en su última parte.
Narra unos hechos que interesan por el tema del conflicto entre hermanos en España y porque lo hace desde una mirada personal y única, la de Elia, que sin entrar a tomar parte en luchas políticas, sufre los males de la guerra mientras intenta mantenerse a flote, viviendo y trabajando como le es posible, mientras espera que su hijo esté sano y salvo, pues está lejos de ella.
La novela tiene una gran carga emocional y está llena de descripciones sugerentes que trasladan al lector a un momento del pasado, en el que se vivía al día y con la falta de seguridad de un futuro inestable. Por ello, resulta interesante y emotiva. Todo ello, está salpicado de las reflexiones y las más íntimas confidencias de Elia, su protagonista, y de otros personajes secundarios, los cuales, están claramente identificados y definidos en la historia, con sus diferentes personalidades muy marcadas, y sus historias aparentemente reales para el lector.
Está dirigida a un público principalmente femenino, que gusta de leer historias íntimas de heroínas cotidianas, con las que pueden identificarse fácilmente.